domingo, 18 de agosto de 2013

La vengánza de tu amor


¿Que más quisiera yo que decirte que perdonaras
mis errores?, yo por no saber soñar he robado los tuyos
junto a tus ilusiones de un futuro juntos, donde ya ni mis cantos no 
caben en una relación que no queda mas que un adiós.

Ahora pago el precio de tus lagrimas que alguna vez por mí han derramado,
alguna tristeza de un amor que yo mismo he destruido, iba yo lastimando
con mis besos a tus labios a otra yo miraba, la amaba y ella me ignoraba.
Perdon, perdon te digo y un adios, que lejos te fuiste a otro mundo y
a otra realidad, donde no estaré mas viendote y donde no podre tener
la oportunidad de redimirme y mi conciencia descansar.

Sin reservas diste tú tu amor, mientras que a otra yo amaba,
un amor que no era mas que un capricho creado
por esta somnoliente soledad creada por mí.
¡Adios!, adios mi verdadero amor, que ahora lo estoy pagando,
lo pago con lagrimas de sangre y una cruz en mi corazón,
que ahora hasta mis edades de antaño viviré sin amor, que tu en tu cielo viviras
feliz y yo solo yo.

Era contigo con quien despertaba en cada mañana a mi lado,
era contigo que un beso podía mover las estrellas, 
por mi Dios que yo te amaba, por el santo que
eso no lo pensaba; que por mi propia traicion te ibas
a alejar, mas lejos que la enfermedad que te llevo a la muerte
te pudo alejar.

Vuela en tu cielo y no te apiedades, mas no me devuelvas 
con tu amor que por mi tristeza y miles mas sufro el
olvido, y tu adios, sufriendo la venganza de tu amor.

domingo, 30 de junio de 2013

En el tiempo antes de existir


Yo era el mar, yo era el viento que sacudía el pelo
en un romance vespertino, el amor en tiempos
de verano, el recuerdo y el olvido, un alguien siendo nadie.

Ya se me olvidaba que yo era el tiempo,  el romantico atrevido, la rosa con 
sus espinas, melodia fluvial que transmitia sentimientos, colores, renglones de una sociedad
de la que ahora no me agrada, libertad!
He llegado a enamorarte bajo tal embrujo que hasta tu alma en estos tiempos que
son tan diferentes de los de antes siente aún mi hechizo, era el consentido
de tu trono angelical, y aunque me echaste como Dios a Lucifer como estrella fugáz
de tu vida, aún me buscas y juradlo, me encontraras.

Antes de existír, era desesperanza para unos y era la alegría para
otros, antes de nacer era un pensamiento que de la nada salió y en la nada
se enamoró, era lo trasverso a la realidad y no existía, porque era
grande, porque no era humano, porque era un simple deseo,
el reprimido nombre al que hoy ya no se es prohibido mencionar.

Alma mía que hoy alaba a Dios y a la véz danza con el diablo, que es tibia
ante su ojos y aún es amada como un niño cuando se ha portado mal,
devora sentimientos y sál de tu capullo que aún en la oscuridad se puede vivir,
es un asunto de cerrar tus ojos y lanzarte,
hacia aquel camino estelár que nos guía hacia el templo de los campeones...
Olímpo.

viernes, 21 de junio de 2013

Poseción


¿Acaso me he desvelado solo pensando en tí?, ¿largo acaso es
mi pensamiento que se me hace dificil responderte cuando te
me insinuas? Nimiedades son los recuerdos y 
graciosa es la bromas de las cuales hemos llamado romance.

Estas son las memorias de un romance de ultratumba porque
de la tumba no ha salido a buscar bien sino
a posecionar mi cuerpo, mi sangre se vuelve negra y mi aliento cenizas 
de lo que fueron palabras alguna vez de amor.
No he pensado mas que en rencor cuando te veo en sus 
brazos, porque mi vista ata mi garganta a una cadena de lo
que alguna vez fue tela, acompañado de avispas, lo que una vez
fueron mariposas.

Yo te hé podido amar mas de lo que disponía,
yo te hubiera hecho feliz con mi voz y mis ritos a tu nombre,
te hubiera hecho sentir como luz del olimpo donde
serías mi futura diosa, mi mana, mi alma.

Ahora rondo como alma en espera de su juicio
a traves del mundo, nada me alegra y nada me excita,
lo que me alimenta son otras bocas y otros vasos, 
que llenan este envase que siempre está pinchado.
Facil es para mí enamorar y devorar nuevas ciguas,
atraerlas con dulce miel a esas abejillas y comermelas poco a poco,
¡ya no sé amar ni mantener una amistad ni mirarme al espejo!, pues mi imagen
no me reconoce y me dice cobarde.

miércoles, 24 de abril de 2013

Dejame entrar


Imposible relatar esa sensación de esa noche
de ensueño en que casi el diablo profana mi alma,
navegaré aún así mis conocimientos y mi memoria aún fresca
de esa macabra entrada a mí.

Fue en una de esas noches, en que veía desvanecer mi vida
a traves de la memoria de lo sucedido durante mi dia,
en esa noche fue que observaba como no estaba solo y como
mi cuerpo reaccionaba a evitar el contacto con alguna de esas sombras que rodeaban mi cama.
Clamé su nombre, el nombre de ese demonio que yo reflejaba todos los dias en mi espejo,
la llamé porque por ella desesperaba, y no me arrepentía aún por clamar por ese nombre: Costela...Costela!

Eso fué tan extraño, estaba en mi baño desnudo y de ahí sentí una gran presión,
sentí una presencia repugnante y atrayente a la vez de afuera, esa voz me llamaba a mí,
llamaba mi sangre y me robaba poco a poco la voluntad.

"¡Dejame entrar!" decía aquella voz desde la ventana de mi baño la cual estaba cerrada,
solamente esa voz irreconocible me tumbo de rodillas y no podía sostenerme en
pie, "¡Dejame entrar!" decía la voz en mi cabeza.

No paré en averiguar de quien era esa voz ni intenté abrir la ventana,
mi cobardía hizo que rezara a Dios buscando su protección, temía a que el diablo
había venido a por mí y me arrastraze hacía mi destinado inframundo, clame por Dios y 
me arrepentí arrodillado, cerré los ojos y seguí rezando, y sentí como se iba esa presencia.

Amanecí en mi cama, fresco, nuevo, y pensaba yo que aquello era un sueño,
del cual no quería volver a soñar jamas,
que equivocado estaba, eso no era un sueño, y lo peor del caso, fue que no era 
Lucifer quien vino a por mi, era mi Costela quien vino a tomarme para ella al fín.

La melancolía y la tristeza envolvieron mi corazon, y miré de nuevo hacia la ventana 
que estaba abierta, la cerré y dije: "Si, tienes permiso de entrar", pero ya era de dia,
y he vuelto al principio, en donde yo la llamaba y la buscaba entre la luna, y ella solo venía
a mí en el paraiso de mis sueños, y pregunto a mis testigos lectores, ¿Será verdad o ficción?

miércoles, 10 de abril de 2013

La llegada de los blancos


Es momento de duelo del cual es inevitable, 
uno de los dos debe caér, uno de los dos al momento
de nuestras espadas chocar, ¡momento de duelo momento de duelo
mis testigos!, esta es la guerra santa por causa de una mujer.
Ese es mi amigo el que está delante de mí con la espada
señalandome, el que peleará a muerte contra mi por su amor
a mi mujer, el que quiere ajusticiarme como si yo fuera el
tirano que violó sus pertenencias, sus ideas de amor retrogadas y falsas,
como si fuera yó el que apuntara contra el la mortal arma para poner
fín a sus días.

Estamos bajo la nieve en el mundo que no para de languidecer,
puedo oír los gritos susurrados, siento que vienen a por mí, eso lo sé, vienen ya por aquella
montaña a lo lejos a gran velocidad, el tiempo es corto
el momento decisivo llegó, el duelo há comenzado y yo todavía sigo sumido
a mis pensamientos.
Mientras peléo, pienso en mi esposa, en su bella cabellera, su sonrisa eterna,
sus ojos, esos ojos, sus ojos son anacoretas de las cuales los mios
nunca pudieron poblar, pero a lo lejos solo a mí me miraban,
bajo el frio de la noche, bajo el calor de la fogata.

Por tanto tiempo desee a esa joven en mi juventud, por tanto tiempo
y lo conseguí, tengo bajo mis alas la que no tiene edad, mi esposa que ahora me quieren arrebatar,
la que me profanó el corazón y lo hizo suyo, la estrigoi que me sigue hasta en mis sueños,
mi Dalilah.

Cuando me dí cuenta, la espada de mi amado amigo está atravezando mi estomago,
sángro consideradamente y palidezco poco a poco,
puedo observár que ya se acercan, esa manta blanca de figuras blancas
y humanas que viene a por mí.

- Amigo- le dije- tu eres el vencedór, mas yo soy un mal perdedór. Me quitáste el derecho a la vida y mi libertad de amarla. Me quitaste mi visión, ya que no podré verla más, me quitaste el tacto, porque no podre hacerla mia, no podre saludarla mas ni despedirme, me quitaste el olfato, ya que me quitaste su aroma, el que yo seguía cuando ella se acababa de bañar o cuando preparaba la comida que tanto estoy empezándo a añorár, me quitaste el oido porque ya no puedo oír sus cantos ni puedo escuchar como me decía que me ama. 
Pero tu tambien perderas todo esto, ya que cuando me pasen a recogér los blancos nunca más la volverás a ver, no podras oír su voz ya que estará lejos, no podrás tocarla con amor porque es a mí a quien ama, no podrás olerla porque olerás solamente el mar y del cual ella se despedirá, ni podrás hablarle porque mudarás de tristeza. Pero no me quitaste la voz, porque en sus sueños le hablaré de mi amor, y de mi se acordará. !Viva Pushkin, viva Pushkin!, ¡porque de tu inspiración creció la mia!

Con mis ultimas fuerzas, corté los ojos de mi amigo, y 
mientras el gritaba de dolor, ví al fin que llegaron los blancos, 
abrí mis brazos al sól y cerré mis ojos, y pude ya no sentir nada, solo escuchar mis pensamientos
que recitaban: Costela



*Este escrito va en honor al gran escritor y novelistas Alekandr Pushke
Por su amor a su esposa  a quién amó hasta el final.


miércoles, 6 de marzo de 2013

Señora del gran letargo



Saludos y partes de cortesía de mi parte mi gran señora, la que diambula en su sala en ambigua
parodia de dama triste.


En el soplo de los aires de Marzo te veo volando entre mis brazos,
mientras mas recapitulo nuestra fé de amores cohibidos a
un si acaso misfortunio que es nuestra distancia.
Tus luceros me iluminan e irrumpen mi sueño en cada madrugada,
obligandome a pensar dentro de esta nube de humo de cigarro, a pensar
lo no alcanzable que son aquellos besos y esa pasión que en un
arrebato de alcohol y lujuria nos envolvimos, como si no hubiera un mañana,
como si no tuvieramos pasado, como si hemos nacido solo para ese momento,
aquel momento que ya quedó en tu olvido.

No pretendas que no pasa nada, que yo tambien sé que he dejado una 
cicatríz en tu alma, ya que quedaron junto a ella mi recuerdo, mi aroma, mi mirada,
me petrifico ante tus palabras en contra de un amor entro nosotros, ya que cuando yo apenas 
aprendía a caminar tu ya quemabas tus deseos en tu luna de miel.

¿A quien le debería de importar un amor como el nuestro, el tipo del que tan solo habitar
en la misma habitación despide armonia y calor a sus habitantes?, mi afrodita,
fruta madura, ¿por qué comer frutas nuevas si la experiencia de la vida
es mas saboriada con el tiempo?

No me empujes cuando trato de besar tus labios, o que, ¿acaso se necesita preguntar para dar
amor a alguien que lo busca?, ¿acaso nuestros cuerpos preguntan por la edad, la raza, y otras cosas 
mientras se entrelazan en el sudor carnal?

No te veo dandome la cara mientras lloras, sabes que tengo razón y niegas
aún mi existencia en tus brazos y te vas en brazos de aquel que 
te niega el placer. ¡Adios incredula, sadista y cruel!, que ya me voy a mi viaje en busqueda
de un nuevo amor, pero aún sabiendo que tu cariño me cazará hasta mi tumba.

martes, 5 de febrero de 2013

Apariencias de la llamada noche

Me levanto de la cama y a mi lado veo con los ojos avivados y desnuda al diablo, la diabla, Lucifer, Costela. Su fuerza fria me entabla una conversación con mi temperatura corporal y me da un escalofrio.
El diablo se lleva consigo la sabana blanca en la que dimos uso como cobertura en esa noche de gran blanca luna llena en la que yo expresé todo mi resentimiento, mi ira, mis reprimiciónes, mi dolor, mi verguenza, mi melancolía, en tan solo unas horas en esa larga noche.

La noche parecía que era un visitante de larga estadía, apenas eran las 10 de las noche y yo pensaba que el dia me iba a robar rapidamente esos momentos de placer. Abrí un vino que estaba en la mesa de noche que ella había traido y vertí el contenido en ambas copas, copas de oro con piedras preciosas y enormes, y le pasé su copa a ella.

- Hace tan solo un rato te negabas a mí cuando conversabamos en aquella mesa del restaurante, y ahora caíste bajo mi trato y mi fuego, donde sudaste con placer, peleaste como fiera por más, y soñaste con un paraíso terrenal- dijo la diabla Costela.

- Me dí cuenta de muchas cosas Costela- le dije- por eso acepté tu trato y tu protección, aunque sé donde depararé en el final, por mas diablo que seas no me podrás salvár fuego propio, yo me consumiré por dentro, ni tu misma te salvarás de ese futuro.

- Ese es el truco- dijo la diabla- engañar, sugestionar a los humanos perdidos como tú. Pero lo curioso es que tu lo sabes, tu sabes igual que yo que estoy podrída por dentro según el termino humano, tu sabes que yo y mis demonios solo hacemos mal y que de seguro te estoy engañando.

- Yo lo sé, pero tu sabes tambien que se me fué negada la entrada a mi paraiso añorado por blasfemar en contra de su santo nombre. Mi vida no tiene color y mi alma solo espera a que el contenedor se rompa para escapar hacia otro infierno.

Lucifer apoyó su cabeza en mi espalda desnuda y me la besa mientras agarra mi falo y dice:

- Tu eres mio ahora, ya ni el padre que tanto querías y añorabas ver te protegerá de mí- comienza a hacer el proceso mas ritmico y sensual- solo nos queda una pequeña eternidad hasta el final, quiero que en estos tiempos disfrutemos de nosotros y de nuestras vistas, acompañame a observar, que te tengo varias cosas interesantes esta noche.

Me ví con un traje negro, de esos de siglos pasasdos y a ella con un vestido escotado de color violeta y largo. Aparecimos instantaneamente dentro de un apartamento. Dentro de este, ví a un hombre llorando en la mesa mientras miraba hacia el vacío. Delante el televisor, yacía en el mueble una niña de unos 7 años que dormía tranquilamente.

- Y tu mi observante favorito- dijo el diablo- ¿que vés acá?, ¿que piensas que pasó?
- No sé decirte, no sé absolutamente nada para establecer juicio alguno.
- Esta bién, te daré una pista: el hombre está triste, acaba de recibír la noticia de que su esposa murió en un accidente en esa noche, tiene una deuda grande con unos "amigos", y su hija no vá al colegio por ello. Explicame, iluminame.

Observo el ambiente, el hombre se vé descuidado, huele bastante mal. Veo en el piso una jeringa y latas de cerveza en la cocina. Lo pienso un rato mas, y digo:

- El hombre tiene problemas con sus contactos porque le debe dinero por las drogas que ha comprado. La deuda lo hunde mas en la depresión y en las drogas, por lo que la esposa sale a trabajar todas las noches en su segundo trabajo para mantenerlos y poco a poco va pagando las deudas, la niña no puede ir al colegio debido a que hay escasez de dinero. La esposa tiene un accidente esta noche, y aquí se observa a el culpable.

El diablo se ríe y le dá una palmada a mi hombro, yo me quedo atonito y dice:

- Pues no es así querido, es lo contrario. La esposa es la drogadicta en este caso, el hombre esta tomando las cervezas mientras la espera dado a que ella tomó el carro y se marchó abandonandolos a ambos para tener una supuesta "libertad" de ellos, de su pasada rutina. Las deudas se les viene encima dado a que ella les debe a unos vendedores de drogas que tienen amenazada con hacerle daño a la familia, por lo que el hombre le pide un gran prestamo a sus amigos y las paga, haciendo que la niña no puede ir al colegio y se mantenga en la casa. El culpable no es el hombre, sino ambos, ya que el no pudo detenerla y la dejo hasta que se convirtiera en una drogadicta, y ella es culpable por los hechos que yá plantee.

Observé al hombre y me compadecí de el, el no me veía, el se paró tambaleandose y muy mal estaba, se le notaba, y se arrodillo delante de su hija que dormía calmadamente. El hombre acarició su pelo y le plantó un beso en la frente. Cuando se paró de nuevo, se cayó y comenzo a convulsionar.

- El morirá ahora- dijo el diablo prendiendo un cigarrillo.
- ¿Morirá?- pregunte sorprendido- ¡pero el no es culpable tanto como lo es la esposa, el merece una oportunidad, el fue un gran padre, su hija estará sola!
- Así es la ley de la vida- dijo el diablo- no soy yo quien hace las reglas sino tu ex-padre. Su alma quedará a merced del fuego infernal junto al de su esposa, para siempre y por siempre, arrepintiendose de haberse conocido, de hacer esos actos, de morir así.

Abandonamos ese lugar. Ahora soy observador del ser humano, mi acompañante es el mismo que nos quiere ver condenados, el diablo. Aparecemos en una calle poco transitada, en ella se encuentra una mujer hermosa que está bajo un poste de luz. Ella abre su cartera y coge el celular, llama y oigo que dice:

- Hola, ¿va todo bien allá?, si, estoy en el bar trabajando. ¿Y Elitia?, ¿se esta comportando bien?, me alegro, gracias por cuidarmela, regresaré dentro de unas horas a por ella, adios.

Cuelga el celular y veo que pasa un carro lentamente. El carro se para y ella se acerca a la ventana y veo que el señor le enseña unos billetes, acto y seguido ella se monta y se va con el.

- ¿Tu sabes que ha pasado verdad?, esa mujer está vendiendo su cuerpo por dinero, un acto de lo mas bajo e inmoral, sin mencionar pecaminoso, ¿que crees de eso?
- Que esta mal, el cuerpo es sagrado, tiene una hija a quien respetar.
- Su hija necesita con que alimentarse- dijo el diablo- no consigue trabajo y está divorciada de su esposo.
- Bueno, tus palabras son verdad, la hija necesita con que vivir y está divorciada con un marido que de seguro que no ayuda en nada.
- ¿Se lo merece?
- No claro que no.
- Estas equivocado otra vez querido- comenzó a explicar pasandome el cigarrillo para mi uso- ella esta en esta situación por no llevarse de sus padres. Ellos la formaron bien, pero ella no quería una vida "aburrida" como sus padres, ella tuvo un novio del cual sus padres le adviertieron que el no era de fiar, pero ella no escucho. Ellos intentaron impedír esa relación, pero ella escapó junto a el y se casaron. Ella quedó embarazada y el le dijo que abortara. Ella accedió entre amenzas de su conyuge y lo abortó, ahora ellos están separados porque ella quedó embarazada otra vez y no quizo abortar, haciendo que el esposo pidiera divorcio sin antes insultarla y maltratarla psicologicamente.

Tomo de la mano de Costela, y nos fuimos, ahora de nuevo a nuestra habitación, que es en una torre enorme no visible al ojo de un humano, donde no hay escaleras, solo una torre en los aires, en el reino de los angeles caidos.

- Me siento un ingenuo que no sabe nada, soy un niño.
- Si que lo eres, pero maduraras bajo mis alas y juzgaras a vista simple lo que antes fuiste: un humano.


domingo, 20 de enero de 2013

Cuerpo de humo de un cigarrillo


La soledad es una compaña porque es alguien, pero es forzosa
porque pocos la quieren, tras las tristes notas de un piano
son pocas las lagrimas que se pueden exprimir de un poeta enamorado,
 gotas de sangre y bohemias palabras que se pierden en un ocaso malhumorado.
Blasfemo contra la sabiduría con una pipa judia donde muchas fueron los profetas que 
fumaron de el en mi mano, demasiados son los escritos de mi vida, mis ganas
de vivír son pocas ya dada a que mi mundo no es mio ya propio ni de mi 
imaginación maldita, sino del mundo que rompe mis esquemas y los quiere transformar
segun quieren.

Nadie puede guiarme, soy mi filosofo propio que de madrugada observa las calles
desde su ventana, canto mis dichos y pienso mis gritos, vuelven a mi 
en esos momentos recuerdos sin rima y sin consonante y la canción que nunca
pude escribir mis aventuras solteras y melancolicas. 
¡Por ella he vociferado mis razones sin razón, ella tiene nombre y no puedo mencionarlo
porque se llama secreto, no se donde vive porque se me es confiscado por
mis sueños, no se como es porque ella profanó mis pensamientos y mi inconciente ya 
no es personal sino hecho ya en otra definición!

Pero si sé ella tiene cuerpo de humo de un cigarrillo, el que vuela silbando
veneno y mientras mas se aleja mas se esparse, mientras mas quieres verla
mas se desvanece, pero mientras mas quieres ignorarla mas te molesta su humo,
 ya que es perjudicial para mí salud, pero es mi adicción que me mata pero 
me hace soñar.