domingo, 27 de septiembre de 2015

La caída de Bayoneta





Oh aquella a quien le dedico mis acciones,
dame tu dia gris para convertirlo en colores,
deja que lo malo de mi cuerpo se evapore,
siniestra la melodia de los abusadores.

Risa cara la que yo veo en tu rostro no es cosa mala,
la venerada la que controla todas mis llamadas,
mirada glaseada con chocolate en sus cachetes mermelada,
superdotada porque el sol se acuesta en su ventana.

Yo vivo para ella la que se despierta en la luna,
la que me pinta la película rosada crayola,
la que me da vino cuando las uvas están caras,
la que se asoma cuando yo abro mi ventana.

Poco a poco devolverte oro por tu mirada,
creerme el mas fuerte solo para poder enamorarte,
ya ella se da cuenta de que es un pedazo de arte,
dispuesta para lo mio sin ideas de ilucionarte.

Pedazo de vida pedazo de cultivo encaprichado,
tu no te das cuenta de la criatura que has engendrado,
nació de ti el sol, el planeta y la luna,
porque mi lindo universo para mi tu eres la pura.

De ti es que se origina la envidia y las cizañas,
porque la mirada de otros hacia ti provoca tales musarañas,
poquito a poquito con mis ideas llego a darle vuelta al mundo,
porque te llego a tu mente, tu corazón y tu trasero.

Como soldado a guerra voy y te convierto en mi martir,
el verano de enamorados comienzan con tu nacimiento y tu caída,
cayó la grande!, la caída de Bayoneta,
cayó la grande!, Babilonia la grande!




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